CULTURA

Van creadores contra falsos

Lourdes Zambrano

Cd. de México (27 octubre 2015) .-00:00 hrs

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Tras varios años de luchar contra la falsificación de obras escultóricas, la Fundación Javier Marín alista una propuesta de modificación al Código Penal Federal para que llenar los vacíos legales que han desalentado que se castigue este ilícito.

Tanto Javier Marín como su hermano, el también escultor Jorge Marín, se han mostrado activos con respecto al tema.

La propuesta busca que se adicione un título al Código, el Vigésimo Séptimo, "De los delitos contra las artes plásticas y sus creadores", que incluiría cinco artículos, del 430 al 435.

Actualmente, se contemplan hasta el título Vigésimo Sexto, "De los delitos en materia de derechos de autor", y los artículos que incluye, del 424 al 429, sólo hablan de copias o reproducciones de fonogramas, videogramas, libros y software y no de esculturas, pinturas, grabados.

El vacío normativo ha tenido una consecuencia negativa para el arte y creadores, señala el documento. "Esto se traduce en una dificultad mayor al momento de la investigación y persecución de estas conductas ilícitas, frustrando la acción penal y dejando consecuentemente una cauda de impunidad ante el desaliento de las víctimas de estos delitos que, por tales motivos, prefieren entonces omitir la noticia criminal".

En los artículos que se propone adicionar se agrega la protección de obra gráfica, escultórica, de dibujo, de talla, de grabado, serigráfica o litográfica, y se busca castigar a quien con fines de lucro reproduzca, replique, duplique o copie lo que es de autoría de otro. También a quien diseñe, elabore, posea, custodie o almacene moldes. Y a quien encargue el ilícito.

Además se propone que pueda ser perseguido no sólo en el ámbito federal, como ahora, sino también en el fuero común.

Debido al vacío legal en la materia, por lo que han optado algunos artistas es registrar una marca, como lo hizo Rodrigo de la Sierra con su personaje Timoteo, o Jorge Marín, cuya firma es ya una marca.

Este último presentó una demanda ante la PGR por falsificación de firma que derivó en una investigación que tardó casi un año. El pasado 29 de septiembre se realizó un cateo en dos bodegas del área metropolitana decomisando 89 piezas apócrifas.

En las fotos del decomiso se aprecian también falsos de Leonora Carrington, Juan Soriano, y Javier Marín, aunque sólo se aseguraron las del artista que presentó la denuncia. También figuraban piezas de De la Sierra.

De la Sierra advierte mayor protección al convertir su personaje, un hombre regordete, en marca.

"El personaje nació en 2005, pero me tardé dos años en realizar todos los trámites. Invertí dinero y tiempo, y ahora ya está registrado ante el Indautor y el IMPI como carpeta de diseño, marca mixta, derechos de autor y propiedad intelectual".

De la Sierra conoce la iniciativa de la Fundación Marín y la apoya, aunque opina que debe discutir y analizar por parte de expertos.

Gabriel Weisz, hijo de Carrington, advierte sobre la propuesta: "Me parece que este tipo de acciones deben detenerse en algún momento, porque, en cualquier otra actividad, la obra se protege. Si hay falsificaciones es porque no hay ninguna ley que proteja a los artistas y a sus obras".

La falsificación de las obras de su madre es un fenómeno que ya sucedía cuando la artista estaba viva, y se ha incrementado ahora con su muerte, señala Weisz. Sin embargo, no ha interpuesto ninguna denuncia para perseguir el delito.

Javier Reza, representante legal de los hermanos Marín, explicó que antes de presentar la propuesta a las comisiones de Cultura y Justicia del Congreso deberá debatirse en algún foro público, aunque aún no tienen fecha para esto.