Uniformad@s
Guadalupe Loaeza EN REFORMA
"¿Falda o pantalón?", me pregunto todas las mañanas antes de vestirme. Confieso que prácticamente diario me inclino por la segunda opción. ¿Por qué? Porque no hay nada más práctico, confortable, pero sobre todo, liberador que usar pantalón, no en balde ahora a esta prenda se le conoce como el símbolo del feminismo. No hace mucho, las mujeres no contábamos con esa libertad. Cuántos novios todavía en los ochenta le sugerían (suplicaban) a su pareja no usarlos. Para estos retrógradas significaba ser poco femenina, demasiado liberal. "¿Para qué ocultas tus piernas tan bonitas con esos pantalones?", "Me gustas más con tus faldas amplias", "De pantalones te ves muy marimacha", etcétera, etcétera.
Descubrió quién es gracias a la escritura y al periodismo. Ha publicado 43 libros. Se considera de izquierda aunque muchos la crean "niña bien". Cuando muera quiere que la vistan con un huipil y le pongan su medalla de la Legión de Honor; que la mitad de sus cenizas quede en el Sena y la otra mitad, en el cementerio de Jamiltepec, Oaxaca, donde descansan sus antepasados. Sus verdaderos afectos son su marido, sus hijos, sus nietos, sus amigos y sus lectores