CULTURA

Une Oaxaca a dos Pritzker

Lourdes Zambrano

Cd. de México (18 diciembre 2015) .-00:00 hrs

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
El primer proyecto en México del arquitecto portugués Álvaro Siza, Premio Pritzker 1992, no es una sala de conciertos o un museo, ni un conjunto residencial, sino algo más modesto: un horno de barro para Casa Wabi, la villa de descanso para artistas diseñada en Puerto Escondido por otro Pritzker, el japonés Tadao Ando.

El espacio, gestionado por el artista mexicano Bosco Sodi, está localizado en una playa semi desértica. Fue inaugurado en 2014 como sede de residencias y un centro cultural para la comunidad, con exposiciones y actividades varias.

Casa Wabi combina el concreto, sello de Ando, con las características palapas de las playas mexicanas, y a esa estética pone ahora su toque Siza.

El portugués, de 82 años, comparte a REFORMA detalles del proyecto: un pabellón de concreto, madera, ladrillo local y palapa en donde se resguardará el horno, que se empezará a construir a mediados de enero.

"Es mi primer proyecto en México", cuenta. "Me interesó el programa sugerido (de Casa Wabi) viendo las fotos del lugar, reuniéndome con el cliente y sintiendo su entusiasmo".

El pabellón servirá para albergar talleres de modelado y fabricar objetos de barro, lo mismo por expertos que artistas residentes y miembros de la comunidad.

Siza es uno de los arquitectos portugueses más destacados, receptor de varios premios e autor de obras como el Centro Gallego de Arte Contemporáneo, en Santiago de Compostela, España; el Edificio Schlesisches Tory, en Berlín, Alemania; y, en su país natal, la Facultad de Arquitectura de Oporto y la Iglesia de Santa María en Marco de Canaveses.

Su inspiración para su proyecto oaxaqueño fue obvio. "El gran espacio en el que está localizada Casa Wabi, la belleza del paisaje y el uso que se le dará", dice.

Los celos profesionales, ante el hecho de colaborar con otro Pritzker, no existieron, al contrario: Siza encontró estimulante el diseño de su colega japonés. Incluso tuvo acceso a la documentación de la obra.

Siza sabe que hay proyectos faltantes en su larga carrera, que ha desarrollado tanto en Portugal como fuera de él, pero dice no sentirse mal por eso. Las oportunidades siguen llegando.

Sobre la arquitectura que están trabajando las nuevas generaciones de arquitectos, las del siglo 21, se siente satisfecho, complacido.

"Las nuevas generaciones están involucradas en los retos contemporáneos y en los posibles caminos que pueden seguir, con gran cantidad de información y una libertad creciente, libre de preconcepciones y limitantes 'provincianas'", celebra: "Y esto significa buena salud".

Lo que viene para Casa Wabi


En los dos años que Casa Wabi lleva en operación, ha recibido 44 artistas en residencia, cuyos conocimientos han hecho extensivos a la comunidad por medio de talleres.

Entre los residentes han figurado Amy Feldman, Benjamín Torres, Gonzalo Lebrija, Francisco Ugarte, Héctor Zamora, Daniel Toca, Pedro Reyes y Santiago Sierra. Para el 2016 se espera la visita de Carlos Amorales, Mario García Torres, Sophie Calle, Jan Hendrix, Simon Fujiwara y Compañía Ciertos Habitantes, entre otros.

Casa Wabi ha albergado, además, al festival de cortometrajes Ambulante.

En febrero recibirá una exposición de Michel François, en colaboración con la Bortolami Gallery, de Nueva York.