Michael Bommer falleció a los 61 años, en junio del 2024. Dos años antes había sido diagnosticado con un cáncer avanzado. Sabía que moriría y se preguntaba cómo podría seguir estando presente en las vidas de su esposa y sus cuatro hijos, aun después de su muerte. Fue entonces cuando su amigo Robert LoCascio le propuso inmortalizarlo, a través de un programa de inteligencia artificial. "Si aceptas, necesitaremos hacer dos cosas", le dijo. "La primera será grabar entrevistas donde narres la historia de tu vida, desde la infancia y, la segunda, tendrás que leer alrededor de 300 frases, con distintas inflexiones y tonos de voz, para que se distinga de un cierra la puerta a un te amo". Michael, con la aprobación de su familia, dedicó sus últimas semanas de vida al proyecto. Esta historia que parece sacada de una película de ciencia ficción, es real.