CULTURA

Un arte que reacciona

Lourdes Zambrano

Cd. de México (25 septiembre 2015) .-00:00 hrs

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Rafael Lozano-Hemmer lleva dos décadas haciendo piezas de arte electrónico a las que no le gusta catalogar con ninguno de los nombres que rondan el medio.

Su arte observa, siente, escucha y reacciona ante la audiencia, y no al revés.

Por primera vez en el País, el mexicano tendrá una gran exposición monográfica a la que decidió titular Pseudomatismos, que abrirá el 29 de octubre en el Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC).

La palabra, que él inventó, es una reflexión filosófica, "medio nerd", dice, sobre la falsedad de que las piezas que realiza sean autómatas. Almacén de corazonadas, por ejemplo, una de sus obras más emblemáticas y con la que representó a México en la Bienal de Venecia en 2007, es una instalación de focos que reaccionan al ritmo cardiaco de la persona que interactúa con ella al tocar un conducto, y que ahora ha actualizado y tendrá sonido.

"En mi trabajo, las obras no tienen esa capacidad de independencia: trabajan en relación con el público. Están incompletas, y únicamente cuando se relacionan emerge la pieza", advierte en entrevista telefónica desde Montreal, donde reside.

"Antes ibas a un museo y preguntaban que si te inspirabas ante la obras. Ahora tú vas al museo y es la obra la que te observa, la que te siente, la que te escucha, la que reacciona".

Aclara que Pseudomatismos no es una retrospectiva, sino una muestra de obras que funcionan en un espacio cerrado, pues gran parte de su trabajo está hecho para el espacio público.

De las 42 obras que se incluirán, hay 5 piezas nuevas. Una de ellas es Nanopanfleto de Babech, que, en resumen, hará circular nanopartículas de oro por el aire del museo, mismas que la gente respirará.

Ninguna de sus obras se pueden explicar en una línea, pues una cosa es la concepción física de la instalación y otra su reflexión intelectual, ligada a su formación universitaria dentro de las ciencias.

El componente tecnológico es una constante en su trabajo; de ahí que decidiera poner a disposición del público, en una USB, los códigos de programación que utiliza para cada pieza.

Para Empaquetamiento de esferas, desarrolló una forma de conectar hasta 998 canales de sonido en una pequeña esfera. Cada canal toca cada una de las composiciones de músicos como Wagner o Schubert.

Destaca otra obra de su producción, aunque fuera del área expositiva de la muestra: Nivel de confianza, un software de reconocimiento facial que busca a los 43 normalistas de Ayotzinapa entre las personas que se paren frente a la pantalla. Propiamente no es parte de la exposición, pero fue dispuesta en la entrada principal del recinto.