Tras los pasos del joven Salvador Novo
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Francisco Morales
Cd. de México (11 enero 2024) .-22:10 hrs
En su libro autobiográfico "La estatua de sal", que guía el recorrido literario de este sábado, Salvador Novo registró con desparpajo sus días de juventud. Crédito: REFORMA / Archivo
Salvador Novo es considerado uno de los escritores más influyentes del siglo 20 mexicano; este 13 de enero se conmemora su 50 aniversario luctuoso. Crédito: Foto: tomada de tv.unam.mx / REFORMA Especial
A partir de las páginas del libro autobiográfico "La estatua de sal", el escritor Sergio Téllez-Pon traza los pasos de Novo desde la casa de su amigo Xavier Villaurrutia en la calle de Mina. Crédito: Óscar Mireles
Aunque no se conoce el número, en la esquina de Izcabalceta y Altamirano, en la colonia San Rafael, vivía el joven Salvador Novo durante la preparatoria. Crédito: Francisco Morales V.
"La familia de Xavier (Villaurrutia) era numerosa: hermanos y hermanas. Habitaban el piso bajo de una casa de piedra", escribe Novo sobre la residencia, en Mina 95, colonia Guerrero, de su amigo. Crédito: Óscar Mireles
En su ensayo "Las locas y la Inquisición", Salvador Novo se refiere al "quemadero" al costado poniente de la Alameda donde numerosos hombres fueron asesinados por "sodomitas". Crédito: Óscar Mireles
La persecución de la homosexualidad en la Ciudad de México tiene uno de sus más lamentables episodios en la redada del "Baile de los 41", como se denuncia en esta placa. Crédito: Óscar Mireles
En la esquina de Donceles y Argentina, Salvador Novo y Xavier Villaurrutia rentaron un departamento que se volvió un enclave para el disfrute y el desenfreno. Crédito: Óscar Mireles
En la Escuela Nacional Preparatoria, en el Antiguo Colegio de San Ildefonso, los amigos Novo y Villaurrutia, junto a otros jóvenes brillantes, fundaron el grupo de Los Contemporáneos. Crédito: Óscar Mireles
La escritura de "La estatua de sal", el libro de memorias de Novo, se vio interrumpida cuando aceptó colaborar con Carlos Chávez en la fundación del INBAL. Su despacho estaba en Bellas Artes. Crédito: Óscar Mireles
En ese año de 1921, el alquiler del cuarto en el Centro Histórico constaba de 30 pesos mensuales, con la luz incluida, que los tres jóvenes estudiantes de la Escuela Nacional Preparatoria, con cierto esfuerzo, lograban pagar a partes iguales.