OPINIÓN

The clown

Guadalupe Loaeza EN REFORMA

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Más de cien millones de televidentes de todo el mundo presenciaron el martes por la noche el peor debate del que se tenga memoria en Estados Unidos: un desastre, un caos, a shit show (un show de mierda), a dumpster fire (un basurero en llamas) e incluso, a national humiliation (una humillación nacional), más adjetivos no podían tener los analistas de CNN al terminar el enfrentamiento entre Joe Biden y Donald Trump, personaje a quien describiera Biden ayer en Ohio como: "vergüenza nacional". No era para menos, más de 35 veces lo interrumpió y más de 13 ocasiones el moderador, Chris Wallace, un periodista muy importante de la cadena Fox, tuvo que llamarlo al orden. En suma, los verdaderos perdedores fueron los espectadores.