QUÉ FÁCIL RESULTA para los gobiernos gastar el dinero recaudado, es decir, el que no es de ellos sino de la sociedad. Ahí está el caso de Altán Redes, que le va a vender a la Comisión Federal de Electricidad el "control" de una empresa que está prácticamente quebrada, que terminó yéndose a concurso mercantil hace tres años y logró salir sólo porque el gobierno la rescató.