PARA ENTENDER por qué Pemex se está yendo a un pozo y no precisamente de petróleo, hay que recurrir a la Teoría del Taquero: si se desploman las ventas de tacos, ¿debería el taquero producir máaas tacos cada día? Evidentemente la respuesta es "no", pues a nadie le gusta perder dinero... salvo a Pemex.