QUE NADIE se espante, peeero en la Ley de Extinción de Dominio aprobada ayer se coló el fantasma de la expropiación al estilo priista de los años setenta del siglo pasado. Y es que ahora el presidente Andrés Manuel López Obrador podrá despojar a los ciudadanos de sus empresas o propiedades y venderlas ¡sin sentencia de un juez!