CULTURA
Suena trompeta de Pacho Flores en México
Erika P. Bucio
Cd. de México (04 diciembre 2015) .-12:29 hrs
"Detesto la actitud de sindicalero. La música no puede verse como un trabajo de burócrata", dice el trompetista venezolano Pacho Flores, un hijo de El Sistema.
Nadie se levantaba de un ensayo de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar si la pieza no salía. Y eso podía significar quedarse desde las ocho de la mañana hasta la una de la madrugada.
"Lo que hay detrás del éxito es la disciplina y el amor hacia la música", dice Flores.
Una disciplina que el fundador del programa, José Antonio Abreu, predica con el ejemplo. Cuando detectó el talento para la dirección de Gustavo Dudamel, entonces concertino de la orquesta, Abreu salía de su oficina a las 12 de la noche e iba a buscarlo hasta donde se alojaba. Trabajaban hasta las 3:30 de la madrugada.
"Hemos hecho ese tipo de sacrificios", narra Flores.
Su encuentro con Abreu también fue providencial. Audicionó para él en sus oficinas de Caracas y ya no dejó que aquel muchacho de 16 años volviera a su casa en San Cristóbal, con su padre, también trompetista, que lo reclamaba para la banda municipal.
Como primera trompeta de la Sinfónica Simón Bolívar, Flores daba no menos de 10 conciertos como solista al año.
Puede presumir su fichaje con Deutsche Grammophon, el único trompetista que ha grabado con el prestigioso sello además del francés Maurice André (1933-2012). Ironías del destino, Flores ganó el concurso internacional que lleva su nombre. Se fijaron en él mientras grababa con Rolando Villazón. Efraín Oscher, autor de Mestizo -concierto para trompeta y orquesta escrito para Flores- hizo los arreglos para esa producción. Buscaban a un solista solvente en la música de cámara, en la improvisación y que entendiera la música latina.
Ha hecho de Valencia, en España, su centro de operaciones. Ahí está la sede de Stomvi, el fabricante de instrumentos de metal, fundado por Vicente Honorato, su mentor.
"Me ha ayudado a ver la trompeta como un instrumento más de cuerda, de encanto. La trompeta puede sonar a violín, a soprano, a oboe, a flauta baja y trombón, y, de último, a trompeta".
Y de hecho, últimamente hace poco el repertorio de trompeta. Toma repertorio de canto, piano, violín, flauta. Hace dos semanas en Colombia hizo repertorio de trombón.
Será solista este fin de semana con la Sinfónica Nacional en el cierre de su temporada. El sábado en el Teatro del Bicentenario de León y el domingo en el Palacio de Bellas Artes, con transmisión en pantalla gigante.
"La belleza de la música radica en emocionar y la música clásica no deja de ser música joven y fresca. Después de todo, Mozart murió con 32 años", dice.
Nadie se levantaba de un ensayo de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar si la pieza no salía. Y eso podía significar quedarse desde las ocho de la mañana hasta la una de la madrugada.
"Lo que hay detrás del éxito es la disciplina y el amor hacia la música", dice Flores.
Una disciplina que el fundador del programa, José Antonio Abreu, predica con el ejemplo. Cuando detectó el talento para la dirección de Gustavo Dudamel, entonces concertino de la orquesta, Abreu salía de su oficina a las 12 de la noche e iba a buscarlo hasta donde se alojaba. Trabajaban hasta las 3:30 de la madrugada.
"Hemos hecho ese tipo de sacrificios", narra Flores.
Su encuentro con Abreu también fue providencial. Audicionó para él en sus oficinas de Caracas y ya no dejó que aquel muchacho de 16 años volviera a su casa en San Cristóbal, con su padre, también trompetista, que lo reclamaba para la banda municipal.
Como primera trompeta de la Sinfónica Simón Bolívar, Flores daba no menos de 10 conciertos como solista al año.
Puede presumir su fichaje con Deutsche Grammophon, el único trompetista que ha grabado con el prestigioso sello además del francés Maurice André (1933-2012). Ironías del destino, Flores ganó el concurso internacional que lleva su nombre. Se fijaron en él mientras grababa con Rolando Villazón. Efraín Oscher, autor de Mestizo -concierto para trompeta y orquesta escrito para Flores- hizo los arreglos para esa producción. Buscaban a un solista solvente en la música de cámara, en la improvisación y que entendiera la música latina.
Ha hecho de Valencia, en España, su centro de operaciones. Ahí está la sede de Stomvi, el fabricante de instrumentos de metal, fundado por Vicente Honorato, su mentor.
"Me ha ayudado a ver la trompeta como un instrumento más de cuerda, de encanto. La trompeta puede sonar a violín, a soprano, a oboe, a flauta baja y trombón, y, de último, a trompeta".
Y de hecho, últimamente hace poco el repertorio de trompeta. Toma repertorio de canto, piano, violín, flauta. Hace dos semanas en Colombia hizo repertorio de trombón.
Será solista este fin de semana con la Sinfónica Nacional en el cierre de su temporada. El sábado en el Teatro del Bicentenario de León y el domingo en el Palacio de Bellas Artes, con transmisión en pantalla gigante.
"La belleza de la música radica en emocionar y la música clásica no deja de ser música joven y fresca. Después de todo, Mozart murió con 32 años", dice.
