Uno y su nadie, su pavorosamente nadie, dice Gonzalo Rojas en aquel verso que inevitablemente te interpela, uno y su nadie y tú piensas en esa relación inversa: cuando los días se van llenando de todo pero tú sientes que te vas quedando sin ti. Dejaste las llaves dentro de la casa, metiste el celular al refrigerador, tuviste una crisis de rinitis, te caíste y te torciste el tobillo, duermes cuatro horas cada noche pero no puedes parar. Tú y tu pavorosamente nadie obligado a ser alguien que no quiere. Y el cansancio agudo, y cinco o seis invitaciones diarias a proyectos nuevos y trabajos sencillos "no te quito mucho tiempo" en el mil veces maldito círculo verde del WhatsApp que te pide, te urge, te exige que respondas.
Es escritora, autora de los libros Cuentos de maldad (y uno que otro maldito) y El niño que fuimos bajo el sello de Alfaguara; Las noches habitadas (Editorial Planeta) y Damas de caza (Editorial Plaza y Valdés). Ha colaborado en El Cultural de La Razón, The Washington Post, SinEmbargoMx, El Malpensante, Confabulario de El Universal, Revista GQ, Revista SOHO y otros medios. Desarrolla guiones para cine, teleseries y audioseries.