Desde el punto de vista psicológico, resulta muy interesante asomarse al centro de cómputo neuronal del señor López. Hizo referencia a que su hijo Jesús Ernesto le preguntó si había cometido errores como Presidente, a lo cual respondió que muchos, y aquí es donde brilló su muy especial conectividad neuronal. Iba bien al reconocer su comisión de errores, pero lo interesante es qué es lo que considera error.