Era el año de 1880, los franceses encabezados por Ferdinand de Lesseps decidieron realizar una obra de comunicación mundial, el canal de Panamá. Después de 9 años abandonaron el proyecto y su compañía entró en quiebra, la razón, más de 20 mil pérdidas humanas por fiebre amarilla, malaria y dengue. Todas ellas enfermedades transmitidas por la picadura de mosco. Durante los siguientes años los Estados Unidos se dieron a la tarea de controlar al vector y preparar a los trabajadores para evitar infecciones y muertes ocasionadas por la transmisión de diferentes microorganismos por la picadura del mosco.