Hace dos años muchos festejamos tener al fin un Presidente que hablaba de la seguridad más allá de la contención, la reacción, los cuerpos policiacos y las fuerzas armadas. López Obrador subraya que debemos ir a las causas estructurales que generan los fenómenos violentos y delictivos para cambiar la situación de inseguridad que nos aqueja y tiene razón. Sin embargo, a dos años de su llegada, se ha quedado corto en la implementación, en los recursos asignados a estas tareas y en el foco que una política exitosa en materia de prevención social requiere.