Errorcito... de 7 años

 

Cada vez me queda más claro que a la gente que maneja la comunicación de Pumas le urge meterse a la aulas de la UNAM, porque en cuestión de historia dan pena ajena...

Fresco en la memoria tengo lo que ocurrió en septiembre de 2009, cuando el Club Universidad organizó un reconocimiento al equipo fundador de 1954 durante un duelo ante Pachuca en el Olímpico Universitario: aquella vez salieron con la puntada de que en su lista de 14 ex jugadores colocaron una crucecita de "en paz descanse" junto al nombre de Roberto Juárez, cuando el primer anotador de la historia auriazul seguía vivito y coleando, e incluso estuvo muy alegre ese día y hasta bromeó con que el club "lo había matado".

Esta semana, llegó a mis manos el número de diciembre de la revista oficial del Club Universidad Nacional, la cual en su contraportada presenta una fotografía de un plantel felino con la leyenda: "Recuerdos dorados. Equipo que ascendió en 1962", promocionando un reportaje en interiores que rememora las bodas de oro de los felinos en Primera División.

Peeeero resulta que los chavos que aparecen en la foto no son del equipo que ascendió el 9 de enero de 1962, sino que se trata ni más ni menos que del equipo fundador que jugó el primer partido de Pumas en Monterrey el 12 de septiembre 1954... Uffff...

Esta nueva pifia tiene muy molestos a varios de los auténticos integrantes que consiguieron el pase al Máximo Circuito, pues hay quien opina que ni en la misma institución les importa realmente y hay quienes nos preguntamos ¿quién es el responsable de que ni el mismo club conozca la historia de los Pumas?

 

 

 

 

La gran duda

 

En la justificación de la FMF sobre la desafiliación de los Indios de Ciudad Juárez hay algo que no me cuadra.

Porque si bien la historia de que llegaron al Draft con adeudos puede ser verídica, un factor que pudo ser fundamental es el encarcelamiento de 3 directivos del club a principios de diciembre por defraudación fiscal.

Recordarán que desde hace un par de años, tanto Indios como Puebla fueron señalados por utilizar "outsourcings" para el pago de nóminas. Pues bien, el tema llevó al tambo a los mencionados dirigentes, cuya identidad es un misterio, porque además de que la justicia se reservó los nombres, en Juárez es un enigma quién quedó como dueño una vez que Francisco Ibarra se borró.

Lo inquietante es que en la Fede ni se acordaron de dichas querellas por defraudación fiscal, porque no creo que desconozcan a los nuevos dueños.

Así, sólo me queda preguntarme ¿No será que esa desafiliación habrá sido un guiño hacia el SAT para que ahí le pare con ese tema, pues hay más colas por ahí que pisar..?

 

san.cadilla@reforma.com