Especialistas advierten que la desatención a problemas de salud mental de la población ha traído consecuencias. Crédito: Especial
La atención a la salud mental pasó de ser un tema difuso y disperso, a una preocupación prioritaria durante la crisis de la pandemia de Covid-19, que se apagó sin seguimiento ni evaluación.
La salud mental no se atiende porque hay otras prioridades del Gobierno y han recortado recursos en los hospitales, en las universidades, y no hay recursos para eso.