OPINIÓN

Prohibido cabecear

Félix Fernández EN REFORMA

MIN SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Recuerdo, específicamente en sexto de primaria (11 o 12 años), cuando nuestro entrenador del Centro Escolar Cedros: Don Chema, llevó a un joven portero de unos 18 años (de nombre o apodo "Tonka") para entrenar con nosotros. Los ejercicios con "Tonka" eran muy sencillos: simplemente despejaba desde atrás de la media cancha, elevado, fuerte y nosotros, al borde del área grande, debíamos rechazar de cabeza. Era aterrador, pero el objetivo se centraba en perder el miedo al balón y aprender a medirlo. Por supuesto, al finalizar dichos entrenamientos, sentíamos la cabeza inflamada y llena de chichones, pero sin mayores consecuencias.