Todavía en abril de 2022 el Fondo Monetario Internacional (FMI) especulaba que el crecimiento global en 2022 sería de 3.6%; economías como la estadounidense, china, de América Latina y el Caribe y de México pudieran crecer en 3.7%, 4.4%, 2.5% y 2.0%, respectivamente. Desde entonces, sin embargo y por diversas razones, las tendencias se han visto ensombrecidas. Existen un grupo de razones comunes: las persistentes y altas tasas de inflación y los altos costos de transporte de personas y de mercancías, así como la invasión de Rusia a Ucrania y el generalizado impacto de la confrontación entre las principales dos economías globales. En las dos principales economías las causas para comprender la tendencia a la baja en su respectivo PIB son diferentes.
Enrique Dussel Peters, Posgrado en Economía, UNAM.