Después de 23 años en los que confeccionó un testamento fílmico sobre el ejercicio del poder en México con
La Ley de Herodes,
Un Mundo Maravilloso,
El Infierno,
La Dictadura Perfecta y
¡Que Viva México!, esta última a estrenarse en cines el 23 de marzo, el realizador
Luis Estrada tenía pensado dejar el cine.