A la opinión pública le tienen sin cuidado los artículos de opinión. No parece tampoco prestar mucha atención a las calificadoras. El presidente López Obrador sigue siendo extraordinariamente popular. Una mayoría muy amplia lo respalda. El presidente más popular de la historia reciente de México. De acuerdo con la medición de Reforma y el Washington Post publicada el 17 de julio, su apoyo ha descendido algunos puntos desde marzo, pero sigue siendo altísima. Siete de cada diez encuestados aprueban el trabajo del presidente. Pocos gobernantes en el mundo podrían presumir un respaldo de esa magnitud. Las cosas, sin embargo, no pintan tan bien cuando se desmenuza la percepción de las distintas áreas del gobierno. No hay tema de la agenda pública que esté a la altura de la popularidad presidencial. En educación recibe los mayores aplausos. El 50% de los encuestados piensa que la política educativa de esta administración es la correcta. En el resto de los temas el respaldo de los encuestados baja de la mitad. El 52% considera que está fracasando en el combate al crimen y el 55% cree que no ha logrado reducir la violencia. No se registra ninguna identificación con las insignias políticas del presidente. Se apoya al presidente, más que la política presidencial.
Estudió Derecho en la UNAM y Ciencia Política en la Universidad de Columbia. Es profesor de la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey. Ha publicado El antiguo régimen y la transición en México y La idiotez de lo perfecto. De sus columnas en la sección cultural de Reforma han aparecido dos cuadernos de Andar y ver.