La semana pasada, la Fiscalía Especializada para la Búsqueda de Personas Desaparecidas recibió una denuncia por la ausencia de los hermanos Tirado Díaz de León y sus tíos José Luis González y Margarita María Ochoa. Poco después, agentes de la Fiscalía encontraron los cadáveres de los hombres y a la mujer con vida en una especie de bodega de un inmueble localizado en la Colonia Roma Norte. Al parecer los cuatro habían sido secuestrados, despojados de sus tarjetas bancarias y, posteriormente, los hombres fueron asesinados. Ya se anunciaron tres detenciones por estos homicidios, entre las cuales se encuentra una persona que habitaba con ellos en esa (donde fueron hallados los cuerpos). Curiosamente, la principal línea de investigación (motivo) no es el rescate (secuestro) ni el robo de fondos bancarios, sino el despojo del inmueble. Porque ese mismo día (domingo) de la denuncia de ausencia, la Fiscalía de Investigación Territorial en Cuauhtémoc recibió otra denuncia, precisamente por el despojo del inmueble donde vivían las víctimas y donde fueron encontradas por los agentes de la Fiscalía. En resumen, el secuestro y triple homicidio se habrían cometido -según las investigaciones iniciales- para poder realizar el despojo de la propiedad en cuestión.