No me pregunten cómo, pero vengo del futuro. He vuelto a casa después de vivir unos días en el 2024. No diré los nombres de los personajes a quienes tuve que convencer para conseguir el financiamiento de mi viaje porque después de lo que he visto, esa información es lo de menos, créanme. El cómo es que fui y cómo es que regresé, pasa a un segundo plano.