Los mexicanos disfrutamos el feliz arribo de la democracia durante el efímero gobierno de Madero y cuando Zedillo reconoció el éxito de la oposición en las elecciones del 2000. Con dichas excepciones, después de la interminable tiranía de Porfirio Díaz, de la Diarquía Obregón-Calles, de la sexagenaria Dictadura Perfecta, de los fraudes electorales cometidos en contra de Vasconcelos en 1929, de Andrew Almazán en 1940, de Henríquez Guzmán en 1952 y de Luis H. Álvarez, en 1958, ahora, en el 2024, estaríamos permitiendo otra estafa electoral que comprometería nuestro presente y nuestro futuro.
Abogado por la UNAM. Dedicado a investigar la verdad oculta de la historia de México, ha escrito 20 novelas históricas y 5 ensayos de diversa naturaleza. Ha impartido conferencias en México y en el extranjero. Es conductor de un programa de televisión y comentarista en distintos medios de radiodifusión. Ha publicado más de 4,000 artículos. Es columnista en el diario Reforma, en El País y en el Chicago Tribune, Hoy, entre otros más.