OPINIÓN

Mejor la muerte (II)

LA OTRA HISTORIA DE MÉXICO / Catón EN REFORMA

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
"... Pero después vino una contra-orden de que no, que qué esperanzas que iba a descansar, que tenía que hablar. Y entonces me pusieron de plantón. Y fue otra clase de martirio, pero tremendo también: estarme preguntando continuamente: '¿Cómo te llamas?', '¿quién te mandó?' '¿Quién es tu familia?' '¿Dónde vives?'. Y yo tenía que contestar, pues lo primero que se me ocurría, pero menos la verdad, por lo que ya he dicho, no por otra circunstancia. Estuve así desde las tres de la mañana o tres y media hasta las nueve de la mañana, es decir, seis horas. Se cansaba uno y seguía otro. Decían: 'Platíquenle', 'platíquenle'.