Fuentes internas de la Policía de Investigación (PDI) de la Ciudad de México afirman que 11 elementos de las coordinaciones territoriales Álvaro Obregón 3 y 4 fueron "re-adscriptos" de manera fulminante hace pocos días por necesidades del servicio. Este tipo de cambio de adscripción es generalmente un castigo interno: mandan al agente lejos de su domicilio (a la otra punta de la Ciudad) o bien, lo trasladan a una Coordinación Territorial menos rentable o, por último, lo sacan de su red de complicidades, clientelismo y negocios. A veces se les saca de su grupo y se les envía a otro a sabiendas que no va a ser recibido con "confianza" y va a estar apartado de la jugada.