Permitan emplear hoy, estimados lectores, un ejemplo reciente y de la vida real para ilustrarles lo INEFICIENTES que son los Gobiernos para administrar, lo que demuestra que su papel no es ser protagonistas del sector económico, sino meramente su regulador. Todos ustedes han escuchado hablar de SpaceX, la empresa espacial privada fundada por Elon Musk (quien no instalará ni un ladrillo en México). Seguramente han escuchado hablar de la NASA (National Aeronautics and Space Administration), fondeada y administrada por el Gobierno norteamericano.