Un camión llegaba al Rancho Izaguirre en las mañanas y las noches. Arriba, desde el techo de la pequeña construcción, vigilaban hombres armados. A los hombres y mujeres que entrenaban allí les daban ropa táctica, de un proveedor que vendía uniformes, botas, accesorios. Sustituían con eso los atuendos con los que habían llegado, casi siempre ropa de paca, comprada en mercados baratos.
Peniley Ramírez es periodista de investigación y autora del libro Los millonarios de la guerra.