Lo malo de las revoluciones es que son revoluciones. Quiero decir que después de una revolución lo que estaba arriba queda abajo, y lo que estaba abajo se vuelve lo de arriba. Eso de las revoluciones es el cuento de nunca acabar. En su famosa novela don Mariano Azuela habló de "Los de abajo". Pues bien: los de abajo, y sus descendientes, se convirtieron en "los de arriba".
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.