CULTURA

Lleva Hagerman alas a El Eco

Lourdes Zambrano

Cd. de México (13 enero 2016) .-00:00 hrs

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La arquitectura emocional, el manifiesto de Mathias Goeritz, fue esencial para que Jerónimo Hagerman desarrollara el proyecto Y si pudiera volar...¿qué tan alto llegaría?, que se inaugura este sábado en el Museo Experimental El Eco.

El concepto primario fue la relación entre interior y exterior que Goeritz quería diluir. Hagerman instaló un círculo de macetas de bambú que atraviesa paredes y forma un nuevo exterior en la sala y un nuevo interior en el patio.

"El manifiesto de arquitectura emocional habla de una relación más espiritual con el lugar. Mathias estaba buscando algo que la arquitectura funcionalista había perdido. Trata de regresar a un sentimiento más espiritual, de conectarse con lo divino.

"Empecé a trabajar con esta idea de borrar y de entender las fronteras que había en El Eco entre el interior y el exterior", comentó el artista visual mexicano.

Reconocido por utilizar plantas en sus instalaciones, Hagerman complementa esta con espejos redondos colocados en lo alto de las paredes tanto adentro como en el patio.

Los espejos funcionarán como reflectores conforme el sol cambie de posición, lo que creará efectos lumínicos.

Hagerman explicó que utiliza las plantas no sólo por estética, sino porque le interesa cómo funcionan, la fotosíntesis, en la cual Sol es la energía fundamental para crear la vida.

El elemento final es una instalación de antenas-bebederos para pájaros en el patio. Aunque tienen la forma tradicional de una antena de televisión satelital, Hagerman les diseñó patas, además de pintarlas de amarillo. Tendrán diferentes alturas; la más alta es de cuatro metros.

El artista sólo utiliza objetos redondos o colocados de esa manera para contrastar con las líneas rectas del edificio. También habrá dos bancas circulares con petates y almohadas para que los visitantes descansen y contemplen.

El título de la exposición es un juego imaginario de pensar qué pasaría si de pronto el espectador se convirtiera en un pájaro, como los que espera lleguen a los bebederos.

"Es una frase muy chiquita que te hace pensar en otra realidad, como una historia que te están contando y con la que te puedas imaginar otras realidades. Parte de lo que hago es buscar otros puntos de vista de la realidad", señaló.

"Cuando empecé a trabajar con plantas; fui viendo los jardines en Kioto, que están hechos para reflexionar no sólo sobre el paisaje, sino sobre muchas cosas más", agregó Hagerman.

La exposición se inaugurará al mediodía y permanecerá en exhibición hasta el 27 de marzo.