OPINIÓN

Leticia Ramírez a la SEP

DE POLÍTICA Y COSAS PEORES / Catón EN REFORMA

3 MIN 30 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
En esta columna me he asignado una modestísima misión: ayudar a que se mantenga el equilibrio del Universo. Ayer narré un chiste blanco. Contaré hoy uno muy rojo a fin de restablecer la armonía mencionada. Quienes tengan pruritos de moralina deben abstenerse de posar los ojos en el relato que ahora sigue... Tres generales norteamericanos llegaron a la edad del retiro. En Washington el Pentágono les dijo que tenían derecho a un bono de jubilación: recibirían mil dólares por cada centímetro de distancia que hubiera entre dos puntos de sus respectivos cuerpos. Cada uno podría escoger con libertad esos dos puntos. El primer general pidió que lo midieran de la cabeza a los pies. Su estatura era de 1.85 metros, de modo que recibió 185 mil dólares. El segundo abrió los brazos a toda su extensión. La midieron, y el jubilado recibió 200 mil dólares. El tercer general hizo una insólita solicitud: pidió que lo midieran -dijo- "de la puntita de la ésta a los éstos". La distancia entre esos dos puntos es muy corta, de modo que los funcionarios se rieron por lo bajo. Uno de ellos procedió a tomar la medida. Puso el extremo de la cinta en la puntita, y al llevarla al segundo punto preguntó intrigado: "¿Dónde están los éstos?". Respondió con toda calma el general: "En Vietnam". (Nota. Gran parte de las reservas de Fort Knox hubieron de usarse para cubrirle el bono)... Dos ejecutivos fueron a comer a un restorán. Cuando entraron uno de ellos vio a dos damas que estaban en una mesa al fondo. "¡Vámonos! -le dijo con alarma al otro-. ¡Una de esas señoras es mi esposa, y la otra mi amante!". Las vio el otro y declaró: "Sí, vámonos. También son las mías"... En presencia de su abuelo Pepito rezó sus oraciones de la noche. Gritó a todo pulmón: "¡Para mi cumpleaños quiero un celular!". Le dijo el abuelo: "No necesitas gritar así. Dios no está sordo". Replicó Pepito: "Pero tú sí"... La designación de Leticia Ramírez como secretaria de Educación Pública constituye una abierta provocación de AMLO a la sociedad civil. Dicha persona carece de méritos -igual que quien la precedió en el cargo- para ocupar un puesto de tanta importancia. Peor aún: el hecho de que provenga de las filas de la CNTE hace de ella una integrante del lumpen magisterial que tantos y tan graves daños ha causado a la educación en varios estados del país. Ya se ve que a AMLO no le importa el bien de México. Su objetivo principal es fortalecerse a sí mismo y fortalecer su régimen, para lo cual se rodea de elementos notoriamente ineficientes, pero que son sus incondicionales partidarios, cuya sumisión llega hasta la ignominia. La carga ideológica que trae consigo la nueva secretaria hará de su actuación una tarea política más que educativa, en detrimento de la formación de la niñez y la juventud de México. De nueva cuenta, la voluntad autocrática de López se impone sobre el bien común... La vida conyugal de aquella madura pareja de casados era monótona, aburrida. Acudieron al consejo de un terapeuta sexual, y éste les recomendó: "Pongan algo de fantasía al realizar el acto. La próxima vez que lo hagan imaginen que están haciéndolo en un velero en una hermosa bahía". Al día siguiente la señora le informó al consejero que la medida no había funcionado. Le dijo: "Mi marido no pudo izar la vela"... Ya conocemos a Babalucas, uno de los personajes que con mayor frecuencia aparece en este espacio. Es corto de entendederas; escaso de caletre. Cierta linda chica le propuso: "Baba: me gustaría disfrutar contigo los placeres de la carne". "¡Fantástico!" -se entusiasmó Babalucas-. ¡Conozco un restorán argentino donde sirven un churrasco que no tiene madre!"... FIN.