El más reciente informe de la Organización Internacional del Trabajo sobre la privatización de las pensiones en América Latina y algunos países de Europa del Este es, francamente, estremecedor. Es el vivo retrato de un error de grandes dimensiones, cuyos impactos se expanden tanto a las economías de los países como a franjas enteras de la población. Los expertos de la OIT documentan la incapacidad de los sistemas privatizados para dotar de seguridad real, en materia de ingresos, a las personas de edad avanzada y en estado de jubilación. Lo que ha prevalecido en estos últimos 30 años son los bajos rendimientos y cobertura y prestaciones insuficientes. También el costo de administración elevadísimo, que resultó mucho más caro de lo que se esperaba. Las promesas de mejores rendimientos y seguridad simple y sencillamente no se cumplieron.
Periodista egresada de la UNAM. Conferencista y autora de libros. Premio Nacional de Periodismo; Premio Ondas Iberoamericano; Premio Maria Moors Cabot; condecorada con la Orden de la Legión de Honor por el Gobierno de Francia; el Gobierno de Alemania le otorgó La Orden del Mérito. Articulista en Reforma, directora del programa "Aristegui" en CNN en Español y del portal Aristegui Noticias.