La sangre es siempre una

Se recuerda con frecuencia aquella expresión del orgullo de Borges. Otros sentirán satisfacción por lo que han escrito. Yo me enorgullezco de los libros que he leído. Al agradecer el premio Alfonso Reyes, Malva Flores ha escrito una carta en la que expresa su orgullo discipular. Vale la pena apartarnos de las urgencias para escuchar su mensaje en defensa de la cultura. Frente a la guerra de las identidades, frente a la bruta hostilidad a la tradición, frente a la tentación del parricidio, Malva Flores defiende lo esencial: la palabra de la conversación eterna. Por eso el homenaje a los cuidadores de la voz.