El pleito del Ejecutivo con la Suprema Corte se ha vuelto parte de la cotidianidad en el país. Es interesante que, cuando las descalificaciones del Presidente a las y los ministros y a su presidenta se vuelven recurrentes, éstas dejan de ser tan estridentes y alarmantes. También es cierto que no es tiempo de grandes reformas ni de Planes B para la Suprema Corte. Ya estamos en la contienda electoral del 2024, lo cual disminuye sustantivamente los riesgos para la Corte en general y para las y los ministros en lo individual. No obstante, ello no significa que el riesgo sea igual a cero. Sin duda, uno de los más importantes asuntos en la discusión del siguiente Presupuesto de Egresos 2024 va a ser el recorte al Poder Judicial y a la Suprema Corte en específico. Esa va a ser, para la Suprema Corte, su última batalla del sexenio.
Profesora investigadora de la División de Estudios Jurídicos del CIDE, Doctora en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid, licenciada en Derecho por el ITAM. Magaloni es precursora en México de los estudios empíricos sobre las instituciones de justicia, con énfasis en la SCJN, el juicio de amparo y el sistema de persecución y enjuiciamiento penal mexicanos. Entre sus recientes publicaciones está "La Suprema Corte y la transición jurídica en México".