En la entrada de la HaHaHouse hay que someterse a una "desinfección" de la negatividad, para luego entrar por una lavadora. Crédito: Damir Sencar / AFP
Los visitantes entran al museo a través de una "lavadora gigante" que los lleva por un tobogán para terminar en una piscina repleta de pelotas blancas. Ahí empieza el recorrido. Crédito: Sa
El HaHaHouse cuenta con ocho salas interactivas que recrean, por ejemplo, el juego de las muñecas de papel que podían vestirse con distintos atuendos. Crédito: Damir Sencar / AFP
En el espacio que aloja la "arena Sumo" se puede luchar con unos trajes de peluche. Crédito: Damir Sencar / AFP
Andrea Golubic, creadora del museo, explica que la idea le surgió durante la pandemia del Covid-19, cuando muchas personas se sintieron deprimidas, aisladas o sin ganas de hacer nada. Crédito: Damir Sencar / AFP
Zorica Bucic, cantante de profesión, prueba el karaoke que distorsiona las voces; "un museo así es una idea perfecta sobre todo hoy en día, cuando nos bombardean con tantas malas noticias", dice. Crédito: Damir Sencar / AFP
El museo ubicado en el centro de Zagreb también cuenta con piezas como la cama de clavos. Crédito: Damir Sencar / AFP