Nos acordamos -quién sabe por qué- de aquellos días en la primaria que cuando los pasillos estaban llenos nunca faltaba un ocurrente que comenzaba con el "¡Voy derecho y no me quito, voy derecho y no me quito!" para abrirse paso.<BR><BR>Quizá se nos vino a la cabeza no por nostalgia, sino porque...