EL LECTOR ESCRIBE / José Hernández Prado EN REFORMA
1 MIN 00 SEG
Si el presidente López Obrador en verdad supiera historia de México, sabría que en 1933 y 1934 Vicente Lombardo Toledano casi logró hacer de la entonces flamante UNAM una institución oficialmente socialista y marxista y que eso fue impedido, tras un intenso debate público, por don Antonio Caso y el rector Manuel Gómez Morin, quienes afianzaron la libertad de docencia y de investigación. En la opinión de estos grandes universitarios, ninguna visión tenía el monopolio de la verdad y ésta sólo puede lograrse con el concurso de todos los enfoques teóricos. El Presidente piensa que la Universidad-Pueblo que él creyó vivir largos años, durante los setenta, es la "esencia de la universidad" y en eso está muy equivocado.