OPINIÓN

El valor de la crítica

Carlos Bravo Regidor EN REFORMA

4 MIN 00 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Al obradorismo no le gusta la crítica. No me refiero a que le moleste cuando se exhiben sus contradicciones, sus fiascos o sus excesos. Eso es normal, a cualquier político, partido o movimiento, en el gobierno o en la oposición, le resulta desagradable que se señalen sus defectos. Me refiero, más bien, a que no reconoce su valor. A que no admite que, a pesar de ser incómoda o hasta antipática, la crítica tiene una utilidad pública: le sirve a la ciudadanía como una práctica a través de la cual ejerce su libertad de pensamiento y su derecho a disentir; como un insumo para enterarse de otros puntos de vista, para conocer ideas distintas a las suyas y formarse una opinión más completa, mejor informada; como un recurso de escrutinio y exigencia frente al poder.