OPINIÓN

El singular ratopín

ALTERIDADES / Gina Tarditi EN REFORMA

3 MIN 00 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
En el marco del Día Mundial del Cáncer (4 de febrero) les comparto la fascinante historia de este animalito, el ratopín desnudo o Heterocephalus glaber, por su nombre científico. Este pequeño roedor, que vive bajo tierra, mantiene intrigado y ocupado a grupos de científicos alrededor del mundo. Mide apenas entre 8 y 20 centímetros, carece prácticamente de pelo, su piel es arrugada y tiene dientes muy prominentes; para decirlo con franqueza, es poco agraciado físicamente. Los ratopines viven en comunidad, por lo general compuestas de entre 50 y 300 miembros, que se organizan, distribuyéndose las tareas. Algunos construyen túneles y cámaras o habitaciones para diferentes propósitos y actividades, como almacenar alimentos o cuidar de las crías. Otros más se encargan de la defensa y seguridad y una sola, la reina, tiene crías. Si la reina muere o desaparece por cualquier motivo, alguna de las subordinas toma su lugar.