Cuando mi madre era joven y se veía en peligro, tiraba un discurso profético que a mí, siendo niña, me tranquilizaba. Una vez un ladrón desistió de asaltar a mi madre y a una de mis hermanas -cuchillo en mano- porque mi madre le vaticinó que el daño que les causaría iba a recaer sobre él y su descendencia por generaciones. Confieso que todavía hoy, cuando le cuento que estoy asustada, su inmediata salmodia profetizadora sobre cómo aquello que me amenaza será derribado, me tranquiliza.
Es escritora, autora de los libros Cuentos de maldad (y uno que otro maldito) y El niño que fuimos bajo el sello de Alfaguara; Las noches habitadas (Editorial Planeta) y Damas de caza (Editorial Plaza y Valdés). Ha colaborado en El Cultural de La Razón, The Washington Post, SinEmbargoMx, El Malpensante, Confabulario de El Universal, Revista GQ, Revista SOHO y otros medios. Desarrolla guiones para cine, teleseries y audioseries.