OPINIÓN

El nuevo (y caro) Aeropuerto

EN FLAGRANCIA / Gustavo Fondevila EN REFORMA

3 MIN 00 SEG

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El 21 del mes próximo, las autoridades federales y locales van a inaugurar el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), con ocho vuelos de cabotaje. Se trata de un aeródromo civil y militar cuya planificación y construcción apuntaba al descongestionamiento del espacio aéreo mexicano. El nuevo Gobierno suspendió definitivamente la construcción del Aeropuerto en Texcoco (bajo sospechas de corrupción), con pérdidas millonarias para avanzar con este nuevo proyecto que, junto a los aeropuertos internacionales actuales de la Ciudad de México (AICM) y de Toluca (AIT) iban a conformar el Sistema Aeroportuario Metropolitano (SAM). Sin embargo, el sueño del Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 (PND) no se va a cumplir sólo con la inauguración del AIFA. Porque la idea original construir otra terminar en el AICM (la 3) y también la compra del porcentaje accionario en poder de particulares del Aeropuerto de Toluca (para poder disponer con libertad de su operación, ampliación. etc.) Y hay que recordar que la construcción de la Terminal 3 y la compra del Aeropuerto de Toluca se cancelaron. El 21 de marzo no se va a inaugurar el SAM (como sostienen las autoridades), sino sólo dos pistas de un aeropuerto que no puede solucionar por sí solo la saturación del espacio aéreo mexicano.