COLABORADOR INVITADO / Alil Álvarez Alcalá EN REFORMA
La debilidad tributaria de nuestro país es evidente. Para los mexicanos, el sistema fiscal es un extractor de recursos, plagado de costosas cargas administrativas, que opera en nuestra contra con la complicidad de los tribunales. Es un sistema percibido como injusto; y es injusto, pues siempre pagan los mismos y se quedan al margen los sectores informales, así como los grupos con arreglos con el poder. El gasto público no se considera pertinente ni efectivo.