Hace muchos años le escuché a Juan Molinar Horcasitas, excelente politólogo, una distinción que viene a cuento traer a colación en estos días. Sostenía Molinar que cualquier análisis que quiera entender la naturaleza de un sistema político tiene que responder, al menos, dos preguntas básicas: la primera es cómo se accede al poder; la segunda, cómo se ejerce. En la cuestión del acceso se resuelve si se trata de un sistema democrático o autoritario; en la del ejercicio, si hay o no hay Estado de derecho. Dentro de cada categoría hay, desde luego, variantes y grados. El análisis puede sofisticarse con muchas preguntas adicionales, relativas a la sociedad, la cultura, la economía o a la historia del país en cuestión. Con todo, más allá de las precisiones y los detalles finos, las distinciones que arrojan esas dos preguntas básicas son las más útiles para definir, aunque sea grosso modo, de qué tipo de sistema político se trata.
Carlos Bravo Regidor (Ciudad de México, 1977). Estudió Relaciones Internacionales en El Colegio de México e Historia en la Universidad de Chicago. Es profesor-investigador asociado en el Programa de Periodismo del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).