El fanático prudente
Juan Villoro EN REFORMA
4 MIN 00 SEG
En tiempos polarizados quiero recordar una discusión sobre el fanatismo. Al inicio de los años noventa, el legendario Fernando Benítez me invitó a coordinar la sección cultural de un nuevo periódico, El Independiente. El subdirector era Miguel Bonasso, que había dirigido el diario Noticias en Argentina y escrito una espléndida novela sin ficción en su exilio mexicano, Recuerdo de la muerte. Mientras Benítez contaba anécdotas de la picaresca intelectual y de sus incansables viajes por el México indígena, Bonasso organizaba equipos de trabajo. Había militado en los Montoneros y mantenía contactos con una diáspora de luchadores sociales. De tanto en tanto me decía: "Juancito, te propongo un colaborador". Generalmente se trataba de izquierdistas de enorme valentía, que habían resistido a la tortura y disponían de suficiente retórica para llenar artículos. Fueron tantos los argentinos que se incorporaron al proyecto que les decíamos "los inevitables".
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Ha obtenido el Premio Herralde por su novela El testigo, el Internacional de Periodismo Vázquez Montalbán por su libro sobre futbol Dios es redondo y el Iberoamericano José Donoso por el conjunto de su obra. Ha sido profesor en la UNAM, Yale, Princeton y la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Entre sus libros para niños destaca El profesor Zíper y la fabulosa guitarra eléctrica.