"En tan solo nueve meses, las mil mayores fortunas del mundo han recuperado su nivel de riqueza previo a la pandemia, mientras que para las personas en mayor situación de pobreza esta recuperación podría tardar más de una década en llegar". Este es el diagnóstico de Oxfam en su informe de enero de 2021. Un texto que nos presenta una fotografía en la era Covid sobre el tamaño del océano que nos separa a unos de otros en términos de la distribución de la riqueza, la raza, el género y otras ondas brechas sociales. Ese océano ahí estaba; la pandemia lo visibilizó y lo ha hecho más extenso. El informe titulado "El virus de la desigualdad: cómo recomponer un mundo devastado por el coronavirus a través de una economía equitativa, justa y sostenible" es un texto que hay que leer. El futuro dependerá, en parte, de nuestra capacidad de solidaridad para actuar de forma colectiva con el propósito compartido de construir las avenidas de la inclusión y la igualdad sociales. Se trata de hacerlo lo más rápidamente posible. Oxfam abre la conversación con algunas propuestas concretas. La pregunta sigue ahí: ¿qué tipo de mundo y de sociedad queremos construir después de todo lo que ha destruido el Covid? El mundo pasado ya no existe: ¿cómo debería ser el nuevo mundo? Muy pocas generaciones tienen la oportunidad y, al mismo tiempo, el desafío de proponer y edificar algo estructuralmente distinto y mejor.
Profesora investigadora de la División de Estudios Jurídicos del CIDE, Doctora en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid, licenciada en Derecho por el ITAM. Magaloni es precursora en México de los estudios empíricos sobre las instituciones de justicia, con énfasis en la SCJN, el juicio de amparo y el sistema de persecución y enjuiciamiento penal mexicanos. Entre sus recientes publicaciones está "La Suprema Corte y la transición jurídica en México".