Hace un par de semanas comenzó a circular en las redes policiales un video donde aparece una camioneta policial (24782) circulando en la colonia Luis Donaldo Colosio (Ecatepec). En una barriada marginal, la camioneta se detiene y tres policías se bajan para detener a dos personas que estaban bebiendo alcohol en la calle (sentado en la banqueta). Las escenas siguientes son de locura: bajan, se acercan a los hombres, discuten un rato, los levantan, los esposan y los suben a la camioneta. Otros hombres se acercan alertados por los ruidos y uno de ellos desarma a uno de los elementos. Después, amenaza a los policías para que liberen al detenido, balea las llantas de la camioneta, el policía desarmado se aleja con miedo y le ruega que le regrese el arma. Los detenidos bajan y se alejan corriendo, los otros policías (sentados en la cabina) descienden del vehículo. Comienzan las amenazas, manos a las armas, amagues, insultos y demás, hasta que el hombre arroja el arma al suelo y se aleja. Los policías se suben nuevamente a la camioneta y se alejan felices de haber recuperado el control de la situación (porque los detenidos quisieron).