CIENCIA

Crean mano biónica sensible al tacto

Diana Saavedra

Ciudad de México (5 febrero 2014) .-14:08 hrs

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Dennis Aabo Sorensen, quien hace nueve años perdió su mano derecha en un accidente, hoy ha vuelto a sentir las texturas y dimensiones de diferentes objetos, mediante una prótesis robótica.

La prótesis, desarrollada por Silvestro Micera, del Instituto de BioRobótica en la Universidad de Pisa, Italia, ha permitido a Dennis percibir la dimensión de un objeto en tiempo real, aun con los ojos cerrados.



El prototipo de esta tecnología biónica fue probada durante el año pasado e instalada en Dennis, de 36 años, mediante un sistema que conectó directamente diversos sensores a los nervios de su brazo, reporta Micera en la más reciente edición de la revista Science Translational Medicine.

"La sensación de sentir las cosas fue increíble. Fui capaz de sentir si un objeto es suave o duro, redondo o cuadrado, todo luego de nueve años", comentó Dennis quien es originario de Dinamarca.

Hace tiempo Micera y su equipo ya habían presentado un brazo robótico que ofrecía la oportunidad al paciente de sentir las cosas, pero aún faltaba elaborar, propiamente, la prótesis, pues en aquella ocasión el paciente estaba "conectado" a una computadora y la prótesis estaba un metro más alejada.

Hoy la historia es diferente, la nueva prótesis es una mano artificial con sensores capaces de detectar la información sobre el tacto, todo al medir la tensión en los tendones artificiales que controlan los movimientos de los dedos y transforman la información en una señal eléctrica.

Ésta es muy "tosca" para ser comprendida por el sistema nervioso, por lo que mediante algoritmos de una computadora, los científicos transforman esa señal en un impulso que puede ser interpretado por los nervios.

La sensación de tacto es entonces activada y enviada mediante una serie de electrodos transneurales, desarrollados por Thomas Stieglitz en Alemania, que fueron implantados en lo que queda del brazo de Dennis.

Al inicio los especialistas se mostraron preocupados porque los nervios de Dennis no habían sido utilizados desde nueve años atrás, pero 19 días después del implante los especialistas realizaron una serie de entrenamientos que han mostrado tener gran éxito en la actualidad.

"Se trata de la primera ocasión en que un sensor neuroprostético permite restaurar el sentido del tacto en una persona que ha perdido un brazo y que utiliza un miembro artificial", comentó Micera.

El siguiente paso para los especialistas será miniaturizar los sistemas electrónicos pues el sistema donde se transforman las señales que son enviadas al sistema nervioso no son portátiles aún.

De hecho, los electrodos fueron removidos del brazo de Dennis un mes después de las pruebas debido a protocolos de seguridad, pero los científicos son optimistas de que cuando terminen el proceso de minaturización podrán permanecer funcionales sin causar daños al sistema nervioso por muchos años.