Recientemente me ha llamado mucho la atención la insistencia con la que el presidente habla de renovar el servicio público y su esfuerzo tan grande para buscarlo, y en eso coincido totalmente con él. La necesidad de renovar con valores y sentido del bien común el rol del "servidor público" es una necesidad que apremia en México, pero válida para el mundo. Históricamente el servicio a los demás es una de las acciones de la humanidad que más nos llena de satisfacción y sentimiento de realización; sin embargo, en el tiempo, el trabajo al servicio de los demás se ha desvirtuado no solo en el gobierno sino en otros sectores de la sociedad; en las organizaciones religiosas, financieras y deportivas. Buscar cómo identificar qué características debemos desarrollar para fomentar más y mejores servidores públicos es un gran reto y oportunidad de mejora para la sociedad. Me parece que si analizamos el comportamiento de algunas organizaciones y de los trabajadores de la salud frente a la pandemia encontraremos las respuestas que buscamos.