¡¡¡Córtalas!!!
Guadalupe Loaeza EN REFORMA
-¡¡¡Córtalas!!!, sentenció con absoluta rabia, la que creía era mi amiga y con la que había cursado prácticamente toda la primaria. Decir "¡córtalas!" a la vez que se unía el dedo pulgar con el índice, formando un circulito, significaba algo como "¡muérete, desaparece, no te quiero ver ni en pintura, ya no existes para mí, estás totalmente excluida del grupo, etcétera, etcétera". Más que una sentencia de guerra, era un finiquito sin posibilidades de perdón. El rechazo, muchas veces hecho públicamente, no quedaba allí, lo peor venía después: la tristeza, la sensación de exclusión y la falta de solidaridad de las demás compañeras; incluso, muchas de ellas aprovechaban el "cortón" para animarse, encaminarse frente a mí y en coro exclamar: "¡Córtalas!".
Descubrió quién es gracias a la escritura y al periodismo. Ha publicado 43 libros. Se considera de izquierda aunque muchos la crean "niña bien". Cuando muera quiere que la vistan con un huipil y le pongan su medalla de la Legión de Honor; que la mitad de sus cenizas quede en el Sena y la otra mitad, en el cementerio de Jamiltepec, Oaxaca, donde descansan sus antepasados. Sus verdaderos afectos son su marido, sus hijos, sus nietos, sus amigos y sus lectores