Con el pie izquierdo
Guadalupe Loaeza EN REFORMA
4 MIN 00 SEG
La futura presidenta de México, Claudia Sheinbaum, supuestamente de izquierda, empezará su gobierno con el pie izquierdo. Mal augurio. Su postura ante el conflicto diplomático entre España y México es muy mala señal. Una vez más, la ex jefa de Gobierno no supo, no quiso o no se atrevió a contrariar la "imbecilidad", como la llamó Jorge F. Hernández, ex agregado cultural de México en España, de no invitar al rey Felipe VI, jefe de Estado de ese país, a su toma de posesión. Por su parte el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, no "logra comprender por qué un gobierno del que pretende ser amigo, como el mexicano, también de ideas progresistas, lo ha llevado a una situación inaceptable". Como se publicó en el "Templo Mayor" de nuestro periódico: "No es una buena señal que el gobierno de Claudia Sheinbaum inicie con un conflicto internacional y menos con una pifia del tamaño del estadio Santiago Beranbéu, al excluir de la lista de invitados a la ceremonia de investidura presidencial al Rey Felipe VI". Por ello el gobierno de España decidió no participar en dicho acontecimiento.
Descubrió quién es gracias a la escritura y al periodismo. Ha publicado 43 libros. Se considera de izquierda aunque muchos la crean "niña bien". Cuando muera quiere que la vistan con un huipil y le pongan su medalla de la Legión de Honor; que la mitad de sus cenizas quede en el Sena y la otra mitad, en el cementerio de Jamiltepec, Oaxaca, donde descansan sus antepasados. Sus verdaderos afectos son su marido, sus hijos, sus nietos, sus amigos y sus lectores